Creo que ya es hora de hacer balance. Si queremos aprender, tenemos que reflexionar sobre lo que la vida nos da y lo que la vida nos quita. Maldito debe. Siempre insuficiente haber.
Éste año comenzó como cualquier otro, entre amigos y esperanzas de cambio. Rezando para que llegara la gran sacudida que desordenara mi vida y que por fin hiciera que las piezas del puzzle encajaran. Quería por encima de todas las cosas que éste de verdad fuera mi año. Y lo ha sido.
Aquí os dejo las 14 grandes lecciones que he aprendido éste año:
1: Quiérete como eres:
Resulta muy aburrido escuchar a las mujeres quejarse de si mismas en bucle. «Ojalá fuera más delgada» «Ojalá tuviera menos tripa«. Todas y cada una de nosotras somos geniales, y hasta que no os lo creáis de verdad, no estaréis agusto con vosotras mismas y seréis plenamente felices. Si no te quieres tú, nadie lo hará por ti.
2: Tus amigos siguen siendo los de siempre:
Todos tenemos amigos por los que daríamos la mano derecha (y la izquierda también si fuera necesario). Esos amigos que se recorren el mundo de aeropuerto en aeropuerto sólo para verte. Esos de los que te sientes tremendamente orgulloso cuando consiguen sus grandes metas, y das gracias por haber crecido a su lado. Esos en los que ahora mismo estás pensando. Estar con ellos es estar en casa. No los pierdas.
3: Los errores no existen:
Enamorate de tus errores y no renuncies a la deliciosa libertad de equivocarte. Lo que tú llamas errores, son en realidad increíbles lecciones que nos da la vida. ¿Imaginas cómo seríamos si nunca nos hubiéramos equivocado? ¿Si nunca hubiésemos cometido ningún error? Yo no querría vivir en un mundo así, sería horriblemente aburrido.
Testea la vida. Asume el fallo y aprende de él. Da gracias a todos tus errores por haberte enseñado lo que quieres en la vida, y lo que es aun más importante…lo que no quieres.
Los errores no existen. Las lecciones sí.
4: Sigue gastándote el dinero el viajar:
No gastes el dinero en cosas, gástalo en momentos. No hay mejor inversión que ver el mundo, que descubrir que hay más allá, que salir de tu zona de confort. El mundo tiene rincones maravillosos que tus ojos tienen que ver antes de cerrarse para siempre. No lo dejes para cuando te toque la lotería. No lo dejes para cuando tengas más tiempo libre. No lo dejes para cuando tengas alguien que te acompañe. No lo dejes. No hay excusas.
Simplemente vuela.
5: Si algo te hace feliz, repitelo:
¿Cuantas veces hemos pensado que lo que hacemos es una pérdida de tiempo? ¿Cuantas señales necesitamos para darnos cuenta de que vida sólo hay una? El tiempo galopa y no puedes dejarlo pasar mientras dedicas tu vida y tu tiempo a ser infeliz. Si algo te gusta, hazlo. Si algo te apasiona, repítelo. Si algo te hace infeliz…déjalo.
6: Mídete con los grandes:
Vince Lombardi decía «mídete con los grandes y serás un grande».
Éste año he tenido la increíble suerte de poder medirme con personas que van mucho más allá de ser grandes. Personas que simplemente siguieron sus sueños y que no temieron dónde les fueran a llevar. Gente inspiradora, gente creativa, gente con ganas de crecer, de aprender y de emprender, de hacerse grande, de comerse el puto mundo por los pies, de hablar con quien sea y mover las montañas que hagan falta sólo para llevar a cabo sus proyectos y dar vida a sus ideas. Esa es la fuerza que mueve el mundo.
Busca a todas esas personas que llegaron lejos pensando como piensas tú, escucha lo que dicen y todo lo que aprendas mejorará tu universo. Desde aquí gracias una vez más a tod@s aquellos genios que hacían de sus días mi inspiración.
«Mídete con los grandes y serás un grande. Mídete con los mejores porque sólo así mejorarás.»
7: Haz una cosa al día que te de miedo:
«Do one thing every day that scares you» que decía Roosevelt. Y cuanta razón tenía…
Pon a prueba tus límites y enfréntate a tus miedos. Cuanto más escalones subas, mayores serán tus logros. El miedo es una respuesta natural ante una situación de peligro, por lo que el temor ante determinadas situaciones no desaparecerá nunca de tu vida. Eso sí, cuantas más veces te enfrentes a él, más divertido y tentador te resultará. «Test yourself»
10: Si algo te hace daño, dilo:
¿Es posible que el dolor se acumule pero la felicidad no? No lo sé, puede. Lo que tengo claro es que si algo te duele, algo te hace daño, dilo antes de que esa sensación se enquiste y la herida sea incurable.
12: Come bien:
Querida Yo del pasado: A tí, que adoras el roce de la carne cruda en tus colmillos, que te encanta el olor del entrecot cuando lo pones un segundo en la sartén para que sólo esté hecho por fuera y sangrante por dentro, que no puedes vivir sin el jamón…ahora eres vegetariana. Te jodes.
13: La realidad es la que es:
Esto es algo que parece muy simple, pero que no lo es. Todos modificamos la realidad de alguna forma, ya sea para que nos duela menos, o simplemente porque es mucho más cómodo vivir en un universo paralelo hecho a nuestra medida. La fragilidad no es un defecto, pero es una cualidad a mejorar. A veces es mejor dejar de rebelarse contra el mundo y en algunos casos, aceptarlo tal y como es. Sólo entonces, podremos enfrentarnos a nuestras flaquezas y transformarlas en nuestros puntos fuertes.
14: La muerte no da miedo:
Hace poco mi abuela me dio una lección que jamás se borrará de mi mente. Estuvo en el hospital, muy grave, y tras la operación, al cabo de un par de días, mientras estaba recostada en la cama, limándose las uñas con una tranquilidad espectacular me dijo: » Hija, tienes que entender que yo no estaré aquí para siempre. Esto es algo natural.»
Ya! Es muy obvio, todos nos morimos. La teoría me la se y de la práctica me llegan noticias…pero en ese momento simplemente lo entendí. Lo interioricé. La vida llega hasta donde llega, y ya. Esto es lo que hay. «La realidad es la que es.»
Aceptar con tranquilidad y paz interior que el momento de morir llegará antes o después es una maravillosa lección que no podría olvidar aunque quisiera.
15: La perfección no existe:
De vez en cuando me quedo pillada. Me cuesta muchísimo tomar decisiones porque intento desesperadamente elegir la opción perfecta. La opción que no cause problemas, la que no tenga inconvenientes. A veces le doy vueltas a las cosas hasta que pierdo la perspectiva. Me he pasado la vida buscando la perfección absoluta, y lo que he conseguido es ponerme metas inalcanzables a las que obviamente, no puedo llegar. Mal. «La realidad es la que es»: La perfección no existe.
No busques la opción perfecta, no busques el amor de cuento, no busques el trabajo sin esfuerzo, no busques la vida sin problemas, no busques adelgazar sin comer, no busques aprender sin estudiar…porque no existe.
A veces, cuanto más queremos mejorar las cosas con la intención de rozar la perfección, más nos alejamos de ella.
Acepta la vida tal y como es, disfrútala. Lucha por ser mejor cada día, pero sin olvidar que lo divertido del viaje es el camino, y no siempre encontrar una meta perfecta.
Ravé.